En muchos restaurantes nos encontramos con cables delgados, mal distribuidos o sin canalización adecuada, porque “salía más barato” o el contratista no consideró el consumo real. Una instalación vieja, mal hecha o sobrecargada puede ser una bomba de tiempo. Si no sabes cómo está tu sistema eléctrico, podrías estar a un paso de:
Altos consumos de luz
Cortes de luz en hora pico
Pérdida de equipos elecrodomesticos o electrónicos
Riesgo de incendios
Problemas con seguros o protección civil
¿Y sabías que muchos contratistas usan cable de alucobre para ahorrarse unos pesos?
El alucobre (aluminio con baño de cobre) es más barato, sí… pero no es apto para soportar la carga eléctrica real de cocinas industriales ni equipos de alto consumo. El resultado: sobrecalentamiento, fallas constantes, y un riesgo real de incendio.
Muchos restauranteros no se enteran hasta que ya es demasiado tarde.
No es lo mismo una cafetería que una cocina con planchas, freidoras, hornos, refrigeradores industriales y equipos conectados todo el día.
El cableado debe instalarse según la carga real que usará tu negocio. Si no se hace un cálculo correcto:
El cable se sobrecalienta
Saltan los breakers
Se daña tu equipo
Tu instalación se vuelve un riesgo constante
Recomendaciones para tener un cableado eléctrico seguro y eficiente en tu restaurante
Haz un cálculo de carga real:
Antes de instalar o modificar algo, es vital calcular cuánta energía consumen tus equipos al mismo tiempo (horno, refrigeradores, freidoras, iluminación, etc.).Usa cable de cobre 100% certificado:
Nada de alucobre ni mezclas. El cobre puro es más seguro, conduce mejor y resiste mejor el calor. Es una inversión, no un gasto.Distribuye correctamente los circuitos:
No cargues todo a un solo breaker o línea. Divide cocina, refrigeración, iluminación y área de servicio en diferentes circuitos.Instala protecciones y tierra física:
Cada línea debe tener su propio breaker, y todo debe estar correctamente aterrizado. Esto protege tu equipo y, más importante, a tu personal.Piensa a futuro:
Si planeas crecer o meter más equipo, deja tu instalación preparada. Es más barato hacerlo desde el inicio que abrir muros otra vez.Haz mantenimientos periódicos:
No esperes a que “huela a quemado” para revisar tu sistema eléctrico. Una inspección preventiva puede evitar cortes de operación o daños graves.